Un análisis del impacto de la ruta MeToo Universidad en 13 universidades españolas ha evidenciando que sus actividades ayudaron a reducir el aislamiento y mejorar síntomas físicos y emocionales de las personas asistentes, incluidas víctimas de violencia. Con 111 encuestas y 4 entrevistas, el estudio destaca el papel clave del respaldo y posicionamiento institucional para aumentar la percepción de seguridad y promover espacios solidarios que apoyen a las víctimas.
La Ruta MeToo Universidad ha mejorado la salud de las supervivientes